El Gobierno realizará esta semana (entre hoy y mañana) la primera colocación de Letras del Tesoro en dólares (Letes) después de las elecciones primarias. Ya con una hoja de ruta diagramada hacia las elecciones de octubre, el oficialismo saldrá a captar u$s750 millones en su primer test oficial post-PASO, a través de Letras a 105 y 210 días de plazo, en el cual las últimas tendrán prioridad, con el fin de disminuir la concentración de vencimientos de deuda.
Un elemento clave para esta colocación es la tasa de interés que pagará el Palacio de Hacienda por emitir deuda de corto plazo, considerando que poco a poco se va quedando sin fechas para colocar dentro de lo que resta de la gestión de Mauricio Macri, lapso para el cual las tasas se encuentran más cerca del 4%. En cambio, los plazos que superan el 10 de diciembre, fecha en la cual comienza el próximo mandato, pagan un rendimiento por encima del 7%.
Lo que ocurre es que los inversores se encuentran a la expectativa de lo que hará la próxima gestión con sus compromisos de deuda, ya que los desembolsos del Fondo Monetario Internacional cubren el pago de capital e intereses para este año. Lo que se espera es que el nuevo Gobierno logre una renegociación del acuerdo con el organismo internacional de crédito. Para ello, será fundamental que por lo menos se logre cumplir con el pago de intereses.
Por el momento, las Letes continúan siendo un instrumento de inversión atractivo, dado que paga un interés muy por encima del de los plazos fijos en dólares. En lo que va del año, la cartera que conduce Nicolás Dujovne no ha tenido problemas para renovar los vencimientos, a pesar de la incertidumbre electoral que giró en torno a estas licitaciones.
Cabe destacar que el oficialismo planteó la necesidad de refinanciar el 46% de estos en 2019 para completar el programa financiero, algo que por el momento ha logrado superar con creces. No obstante, en los últimos meses, la Secretaría del Tesoro decidió acortar los plazos de colocación para mitigar el riesgo electoral y pagar una menor tasa de interés, un fenómeno que generó una mayor concentración de los vencimientos para el tercer y el cuarto trimestre.
Desde el oficialismo confían en que en los próximos meses se den a conocer números favorables desde la macroeconomía real. Se espera que la inflación continúe mostrando señales de desaceleración, a pesar de un escenario de mayor presión cambiaria y que la actividad económica continúe presentando mejoras en relación con el mes anterior, en la serie desestacionalizada. Y mejoras en la comparación interanual, de la mano del sector agropecuario, que viene mostrando una buena performance.