El defensor general del Ministerio Público de la Defensa, Eduardo Luis Aguirre, fue distinguido con el primer premio del 15° Concurso Internacional de Ensayo sobre el Código Iberoamericano de Ética Judicial (CIEJ).
En esta ocasión el certamen estuvo dedicado al tema secreto profesional, y el trabajo presentado por el funcionario pampeano se tituló “El secreto profesional de los jueces. Hacia un acto instituyente en Iberoamérica”.
Esta fue la primera vez, en una década y media, que un participante argentino accede al primer premio.
“Lo que hice fue trabajar desde una perspectiva de resignificación del concepto de secreto profesional, y actualizarlo respecto de las nuevas formas de asedio al secreto profesional de jueces y funcionarios judiciales que se dan en todo el mundo; y que, de alguna manera, deberían inscribirse como nuevas formas de intervención de diferentes factores, lo que implicaría la necesidad de que el horizonte de proyección del concepto se adecue a esta nueva realidad”, señaló Aguirre al sintetizar el objetivo del ensayo.
El funcionario de 65 años ocupa la defensoría general desde 2011. Es abogado, doctor en ciencias jurídicas y sociales, magíster en ciencias penales, especialista en derecho penal internacional y docente de la Universidad Nacional de La Pampa.
El objetivo del concurso, que se organizada en forma anual, es “profundizar en el estudio y difusión de los principios de ética judicial en Iberoamérica, considerando que tenerlos en la labor diaria de los jueces contribuye a lograr la excelencia en el desempeño de su función, fortaleciendo la confianza de los ciudadanos en sus jueces y coadyuvando a la cohesión social”, expresó la Comisión Iberoamericana de Ética Judicial en los fundamentos de la propuesta académica.
Y agregó, entre otros considerandos, que también se busca con los ensayos jurídicos “fomentar el análisis y la discusión sobre los principios y valores contenidos en el Código Iberoamericano de Ética Judicial”.
En esta ocasión se dio una particularidad. El certamen premia a los tres mejores ensayos y, desde que se implementó en 2007, solo dos veces un jurista argentino había accedido a ese podio. Fueron dos terceros puestos en 2011 y 2016 cuando los trabajos fueron acerca de conocimiento y capacitación y transparencia, respectivamente.
Ahora, no solo Aguirre obtuvo la distinción principal, sino que otros dos argentinos fueron reconocidos con el segundo y el tercer premio: David Pachtman, del Poder Judicial de Jujuy, con “Transparencia y secreto profesional. La prudencia judicial como algodón entre dos vidrios”; y Francisco José Capellotti, del Poder Judicial de Tierra del Fuego, con “Secreto profesional y transparencia: límites y alcances entre ambos extremos”.
El concurso contó, además, con participantes de República Dominicana, Colombia, Ecuador, Honduras y México.
La Comisión Iberoamericana de Ética Judicial está compuesta por nueve comisionados y un secretario ejecutivo, elegidos cada cuatro años, y desarrolla una labor consultiva –que se ha manifestado a través de varios dictámenes– acerca del desempeño de los jueces en ámbitos como las redes sociales, las relaciones con los medios de comunicación, etc.
Actualmente uno de los comisionados, en representación del país, es el presidente del Superior Tribunal de Justicia de La Pampa, Eduardo Fernández Mendía.