“Basta de grietas”, subrayó el gobernador Sergio Ziliotto en Villa Mirasol, desde donde hizo un fuerte llamado a “trabajar por el bien común” dejando de lado las banderías políticas. El mandatario pampeano reconoció que la economía nacional “está en un momento muy difícil e impacta muy fuerte, principalmente en los que menos tiene, aún en los asalariados”. “No es momento de peleas entre dirigentes. Tenemos que trabajar más, gritar menos y escucharnos más”, reclamó.
Ziliotto resaltó la posibilidad de contar con obras financiadas por el Gobierno Nacional a través del programa Argentina Hace, como son “los talleres (que se construyen en Villa Mirasol) que permiten generar mano de obra calificada, algo que tanto demanda el sector privado”
En otro orden precisó que “en Villa Mirasol se están terminando cuatro viviendas más y, como siempre lo decimos en todas las localidades, más allá del signo político de la intendenta o el intendente, vivienda que se termina, vivienda que comienza otra”.
“BASTA DE GRIETAS”
“Para nosotros ante cada necesidad hay un derecho, algo que se ha tratado de desvirtuar por algunos que, a partir de un pedestal que les da un cargo, se ponen a desafiar cual es el rol del Estado”, sostuvo
Ratificó ante los presentes la decisión de “seguir trabajando en conjunto por un objetivo común” y destacó la actitud de los concejales, oficialistas y opositores, que trabajan junto al intendente de Villa Mirasol sin ningún tipo de bandería política. “Esto no abunda en la Argentina”, resaltó.
Y ejemplificó que en Villa Mirasol el Concejo Deliberante “no está conformado íntegramente por concejales del mismo signo política que el intendente, sin embargo han priorizado el interés común. Eso debemos hacer en la Argentina: basta de grietas”.