Sergio Massa finalizó su primer día al frente del Palacio de Hacienda y trabajó junto a su equipo en lo que serán las primeras semanas de su gestión en un escenario “complejo”. En el Gobierno ya saben que el dato de inflación de julio será un “shock” para el Gobierno, mientras que el de agosto también será muy alto. En cuanto a los salarios, la apuesta oficial es, al menos, que empaten en la carrera con el IPC.
Fuentes del Ministerio de Economía comentaron a BAE Negocios que Massa se reunió con economistas este jueves por la mañana, previo al encuentro que tuvo con sus secretarios, aunque prefirieron no dar precisiones al respecto. A sus subordinados les pidió que realicen para los próximos días una lista de “5 urgencias y 10 prioridades” para comenzar a delinear el plan de las primeras semanas.
Más tarde, hubo un encuentro con el presidente Alberto Fernández en el que conversaron sobre un panorama “complejo” para los próximos meses en materia fiscal, monetaria, de reservas e inflación. Respecto a este punto, en el Gobierno ya no hablan sobre la posibilidad de que los salarios le ganen a la inflación. En los pasillos del Palacio de Hacienda se comentaba que el objetivo es “al menos que empaten”.
Según pudo saber este medio, el dato de julio del REM arrojará una expectativa del 7,5% promedio y en agosto no estará muy por debajo. Así, superarían el guarismo de marzo, que fue 6,7%, debido a la fuerte disparada del dólar y las remarcaciones que se dieron a partir de junio.
La apuesta del Ministerio de Economía es que haya una baja paulatina a partir de septiembre, cuando esperan una menor presión devaluatoria por menores importaciones de energía y un ingreso de divisas que esperan por parte del agro, pero también desde créditos internacionales.
Por otro lado, se renegociará el esquema actual de Precios Cuidados con acuerdos “voluntarios” y la idea es incrementar la fiscalización. De todas formas, las estimaciones privadas son muy duras y ya superan en muchos casos el 90% para 2022, muy por encima del 62% de techo proyectado en el Presupuesto que dejó Martín Guzmán.
En cuanto a los ingresos, el Gobierno espera aplicar una serie de complementos como paliativo para la difícil situación actual. Por caso, este jueves fue convocado el Consejo de Salario Mínimo, Vital y Móvil para el próximo 18 de agosto. Al respecto, Massa había adelantado que “los salarios entre $50.000 y $150.000 son los que se ven más perjudicados, allí vamos a enfocar el estudio de la modificación de las asignaciones familiares”.
Asimismo, el miércoles se anunciará un refuerzo para jubilados, que se aplicará a partir de septiembre, destinado a “superar el daño de la inflación”. El ministro también anticipó que «se convocará el jueves de la semana que viene a entidades empresarias y de trabajadores a los efectos de asegurar un mecanismo que permita recuperar ingresos en trabajadores del sector privado, que incluye la mejora de las asignaciones familiares”.
