Un año más tarde por la disputa del Mundial 2022, Qatar vuelve a centrar las miradas del fútbol con la organización de la Copa Asia 2023, el mayor torneo de selecciones del continente, equivalente a la Eurocopa y Copa América, y con un claro favorito que por actualidad y nombres se alza sobre el resto: Japón.
Cinco años después del milagro de la Qatar de Félix Sánchez, que se coronó campeona asiática en Emiratos 2019, el balón vuelve a rodar en el país donde se celebró el último Mundial.
Aunque la selección nipona es la más laureada del torneo asiático con cuatro entorchados, hace ya 13 años que no saborean las mieles del éxito continental.
En 2019 hicieron un torneo perfecto, ganando todos sus partidos y eliminando a grandes rivales como Arabia Saudí (octavos) e Irán (semifinal), pero sucumbiendo en la final ante la Qatar de Félix Sánchez.
Ahora, de la mano de Moriyasu, el proyecto que iniciaron en 2018 y que les llevó a la citada final asiática y a unos históricos octavos de final en el Mundial 2022 tras clasificar en un grupo por delante de Alemania y España para caer posteriormente en la tanda de penaltis ante Croacia.
Con una pequeña revolución en la convocatoria de por medio -repiten 14 de los 26 jugadores que asistieron a Qatar 2022, el técnico nipón tiene claro su objetivo.
«En Emiratos 2019 fue frustrate perder la final y ahora no rehuyó la responsabilidad de decir que queremos ganar la Copa Asia en Qatar. Para ello he seleccionado al mejor grupo posible de futbolistas».
La Copa Asiática se disputará en Qatar del 12 de enero al 10 de febrero, fecha en la que está pactada la gran final de la competición en el Estadio de Lusail.
Todos los partidos serán transmitidos en la Argentina y Latinoamérica por Star+ y se cree que algunos podrán televisarse por las diferentes señales que tiene ESPN.