Personal de la Patrulla Rural dependiente de la Coordinación Área Zona Oeste (UR I), realizó el fin de semana una laboriosa tarea en prevención de delitos rurales y los habituales controles en la época de caza deportiva. Hubo dos procedimientos destacables: el sábado identificaron a tres cazadores de Santa Rosa en la zona de Jagüel del Monte quienes luego huyeron. Y el domingo un propietario rural cercano a Carro Quemado fue sorprendido con jauría dentro de un campo vecino al suyo y también huyó. Todos incurrieron en “resistencia a la autoridad” y la Fiscalía de Victorica tiene las causas.
La fuente fue el comisario Marcelo Bustos Paulino, coordinador de este área, quien reveló que el primero de los casos ocurrió en horas de la madrugada del sábado en la ruta provincial 14, en cercanías del paraje Jagüel del Monte. El procedimiento fue en las inmediaciones de la estancia San Eduardo y el coto La Juanita, donde fue interceptada una camioneta Chevrolet S10 negra, publicó el diario La Arena.
En la pick up viajaban tres hombres que al identificarlos constataron que era vecinos de Santa Rosa, y llevaban un arma de fuego. También confirmó que, tras el procedimiento de identificación, atento a la copiosa lluvia que se precipitaba, los invitaron a trasladarse al puesto caminero de El Durazno, a fin de dar curso a las actuaciones administrativas, entre ellas las actas de infracción cosa que aceptaron. Sin embargo en un momento decidieron huir a toda velocidad con dirección a la ruta provincial 15, es decir en sentido contrario.
Los agentes, por seguridad, decidieron no perseguirlos porque las tres personas estaban identificadas por lo que dieron curso a actuaciones judiciales de oficio por Resistencia a la autoridad y actuaciones simples por infracción a la Ley 1194 -transitar por caminos o calles públicas reflectoreando con fines de caza-, con la intervención del Ministerio Público Fiscal de la IV Circunscripción Judicial y de la Dirección de Recursos Naturales.
Furtivos en Carro Quemado.
En la madrugada del domingo, la policía fue alertada por productores rurales de posible presencia de cazadores furtivos en un campo ubicado en el “Camino de las bombas” en cercanías a Carro Quemado. Aproximadamente a las 2, una patrulla detectó un vehículo dentro de un predio que, cuando vio las luces hizo movimientos para salir al camino terciario mencionado.
Se trataba de una Renault Oroch que salió del campo y se dirigió hacia el norte. Los agentes intentaron detener el rodado con balizas y sirena encendidas, pero el conductor no acató esas señales y tras un corto tramo ingresó a otro predio que resultó ser de su propiedad.
Allí constataron que la Oroch era ocupada por tres mayores de edad y tres menores. También que “en la caja llevaban tres canes en la caja sin jaula y con la compuerta abierta, incumpliendo la normativa vigente”. Bustos Paulino reveló que durante “la inspección, se procedió al secuestro de tres cuchillos, una chaira, una linterna, 52 municiones calibre 22 y una vaina servida calibre 30-06, pero no se encontraron armas de fuego en el vehículo”.
En ese momento descubrieron que “carecían de permisos de caza, autorización del dueño del campo y libretas sanitarias o chips identificatorios de los perros”. A causa de esta situación “se iniciaron actuaciones simples por Infracción a la Ley 1194 por “circular con jauría sin documentación y de forma inadecuada, sin permiso y practicar la actividad cinegética con menores fuera de horario”. Y confirmó que también se secuestraron los elementos relacionados con la actividad cinegética, además del vehículo”.