El ministro de Economía, Martín Guzmán, afirmó que el mundo está sufriendo una ola inflacionaria «sin precedentes» y reconoció que esta situación está pegando «con fuerza» en Argentina, por lo cual el Gobierno trabaja «para mantener el poder adquisitivo y los ingresos y permitir que la economía se siga recuperando».
«Es una situación que no tiene precedentes en décadas», dijo Guzmán a Télam luego de reunirse con el ministro de Minas y Energía de Brasil, Bento Albuquerque, en la sede de la Federación de Industrias del Estado de San Pablo (Fiesp).
Durante la jornada, el Gobierno brasileño informó que la inflación de marzo fue de 1,62 por ciento, el mayor nivel desde 1994 para el tercer mes del año, en el marco del impacto inflacionario que se registra a nivel global.
«Marzo ha sido el peor mes de inflación en todo el mundo. Vemos cosas completamente anómalas», dijo Guzmán.
El Gobierno espera recibir el próximo miércoles una mala noticia ya que se espera que la inflación de marzo marque un pico, aunque se proyecta una baja en abril. Analistas y consultoras, de hecho, prevén que la suba de precios de marzo será del 5,5%, según el Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM) realizado por el Banco Central y difundido este viernes.
Los 41 participantes del REM, entre los que se cuentan 27 consultoras y centros de investigación locales e internacionales y 14 entidades financieras argentinas, revisaron las previsiones de inflación para 2022 ubicándola en 60,9% interanual, 6 puntos porcentual más que el relevamiento previo.
PRESIÓN POR LOS PRECIOS
«Hubo en la economía global una presión por los precios y se sumó la guerra en Ucrania, que es de una magnitud enorme en términos del impacto en las cadenas de producción de alimentos, minerales y energía», subrayó el ministro Guzmán.
A modo de ejemplo citó que en marzo en los Países Bajos la inflación fue de 3,6 por ciento; y de 2,5% en Alemania.
En el caso de Brasil, que en marzo subió 1,62%, a lo largo de los últimos doce meses acumula un avance superior al 11%, más del doble de la meta fijada por el Banco Central brasileño.
«Nuestras economías no están exentas» de la ola inflacionaria que se registra a nivel global, dijo el ministro.
«En Argentina esta situación tan difícil en el plano internacional está pegando con fuerza y trabajamos para mantener el poder adquisitivo y los ingresos y permitir que la economía se siga recuperando», subrayó Guzmán.
ACUERDOS POR EL GAS Y LA ENERGÍA
De cara a lo que viene, el Gobierno por el momento se garantizó la provisión de gas de Bolivia para el invierno y de energía eléctrica de parte de Brasil.
Brasil garantizará la seguridad energética argentina poniendo a disposición 2 gigavatios de energía eléctrica para el período comprendido entre los meses de mayo y setiembre.
En paralelo, Bolivia garantizará 14 millones de metros cúbicos de gas durante este invierno, con la posibilidad de sumar un volumen adicional, que podrían estar entre los 16 y 18 millones de metros cúbicos, con lo que no tendría que haber cortes programados del suministro para la industria, como se venía negociando con la UIA.