En el Hospital de Complejidad Creciente René Favaloro se realizó un operativo de ablación multiorgánica de alta complejidad, coordinado por el CUCAI La Pampa y con la participación de equipos locales junto a profesionales del Hospital Garrahan y del Instituto de Trasplante y Alta Complejidad (ITAC).
La intervención se realizó sobre un donante pediátrico de 13 años y se extendió desde las primeras horas hasta el mediodía de este lunes, logrando la ablación de hígado, riñón, páncreas y tejidos.
El equipo del Hospital Garrahan estuvo a cargo de la ablación hepática, mientras que el ITAC realizó la ablación reno-pancreática y del riñón derecho, procedimientos de elevada complejidad tanto en la ablación como en el trasplante. Por su parte, CUCAI La Pampa coordinó la ablación de tejidos.
El coordinador de CUCAI La Pampa, Javier Tevez, subrayó la trascendencia del acompañamiento familiar en este tipo de procesos y expresó: “Lo primero que debemos hacer es agradecer el acompañamiento de la familia del donante. Sabemos que atraviesan uno de los momentos más difíciles, como es la pérdida física de un ser amado, y sin su decisión altruista nada de esto hubiera sido posible”.
“En los menores de edad siempre se requiere autorización familiar, y en este caso los familiares acompañaron el proceso desde el principio. Es un acto de empatía, solidaridad y amor que trasciende la pérdida y cuyo impacto se verá reflejado en la vida de otras personas”, agregó.
El profesional detalló que el hígado «sería trasplantado a un paciente pediátrico de 11 años, el bloque reno-pancreático a un paciente adulto de 35 años, el riñón continúa en proceso de distribución con posibilidad de asignación a un paciente pampeano en lista de espera según compatibilidad, y las córneas serán distribuidas en los próximos días”. “En total, cinco personas recibirán órganos o tejidos, con un impacto directo en su calidad y expectativa de vida”, agregó.
PROFESIONALISMO Y ACOMPAÑAMIENTO
El coordinador remarcó la calidad de la atención brindada y destacó «el accionar de los servicios intervinientes”. “En primer lugar, la terapia intensiva pediátrica, que junto a todo su personal trabajaron con excelencia desde el primer momento. Uno de los indicadores más importantes de calidad en estos procesos es la detección de los potenciales donantes y luego el mantenimiento de esos donantes, para que los órganos lleguen en condiciones óptimas de ser ablacionados y posteriormente trasplantados”, dijo.
“Esto refleja la gran atención y calidad dentro de la terapia pediátrica del hospital, a cargo de los profesionales de la Provincia, quienes además brindaron una valiosa contención a la familia, aspecto que siempre debemos remarcar. También es necesario agradecer a todos los servicios que participaron, porque para poder realizar estos operativos se requiere un enorme trabajo interdisciplinario”, expresó Tevez.
“Son muchos –continuó- los equipos que trabajan coordinadamente: el servicio de enfermería, laboratorio, banco de sangre, epidemiología, métodos complementarios, cardiólogos, ecografistas, tomografistas, administración, limpieza, entre otros. Todo el personal del Hospital de Complejidad Creciente René Favaloro trabajó de manera interdisciplinaria y multidisciplinaria, y esa coordinación fue lo que permitió concretar un procedimiento de alta complejidad».
UN ACTO DE AMOR
Finalmente, aseguró que la donación de órganos es, ante todo, «un acto de empatía y altruismo”. “Este operativo como tantos otros realizados, reafirman la importancia de visibilizar la donación como un gesto de amor único y demuestra el compromiso de la política pública en La Pampa en materia de trasplante”, señaló..
“Detrás de cada donación hay una familia que, en medio del dolor más profundo, toma la decisión de transformar ese sufrimiento en esperanza para otros. Cada vez que se concreta un operativo de estas características se salvan vidas y se refuerza la conciencia social sobre la importancia de la donación”, concluyó.
















