Tres fueron los disparos que recibió Susana Muñoz por parte de quien era su pareja, Gustavo Antonio Bolan. Se estima que para el segundo ya había fallecido.
Con el correr de las horas van saliendo a la luz los detalles de las pericias que se realizaron –el viernes a la tarde- en la vivienda que ambos compartían en la calle Salveire al 1.700, en el barrio de Villa Elisa. La hipótesis de que se trató de un femicidio seguido de muerte cobra aún más fuerza tras las últimas novedades, publicó el diario La Arena.
Según explicaron fuentes ligadas a la investigación, el efectivo de la Policía Federal efectuó tres disparos. Aparentemente «el primero le da en el hombro», lo que hace presumir que fue en un intento de defensa por parte de Muñoz, y «sale a la altura del cuello».
El segundo fue en el rostro, «en la fosa nasal izquierda y sale a la altura del parietal derecho, y el tercero en la fosa nasal derecha y sale a la altura de la nuca». Ya en el segundo impacto, consideraron, la mujer estaría sin vida, lo que habla del ensañamiento del autor.
Luego de esto, según la mecánica del crimen que se pudo reconstruir hasta el momento, Bolan habría iniciado dos focos de incendio antes de efectuar un cuarto disparo para quitarse la vida.
EL EPISODIO
El violento episodio ocurrió ayer, pasadas las 17, en una vivienda ubicada en la calle Salveire al 1.700, casi Escuela Normal, del barrio Villa Elisa. Fuentes ligadas a la investigación explicaron que la principal hipótesis indica que un efectivo de la Policía Federal, de 44 años, le habría disparado a su pareja de 51 años con su arma reglamentaria calibre 9 milímetros. Luego, habría incendiado la vivienda y quitado la vida. En base a la confirmación de familiares, la Policía identificó al hombre como Gustavo Antonio Bolan y a la mujer como Susana Muñoz.
Las primeras versiones policiales indican que ambos eran pareja desde hace cinco años y que, antes del episodio, Bolan habría llamado a una de sus hijas para avisarle lo que estaba por ocurrir. Ante esto, la joven se comunicó con uno de los hijos de la víctima, quien fue el primero en llegar a la vivienda y al observar el humo que salía de la casa, ingresó por la parte trasera y se encontró con el brutal crimen en la habitación.
El Laboratorio Forense de la Agencia de Investigación Científica (AIC) trabajó en las pericias dentro de la vivienda hasta minutos después de las 23, horario en el que fueron retirados los cuerpos.
Fuentes ligadas a la investigación confirmaron que el incendio tuvo dos focos iniciales: uno en la cama de dos plazas de la habitación y el otro en el sillón ubicado en el comedor. De esta manera, queda demostrado que el incendio fue intencional.
En el lugar intervino personal del Servicio de Emergencias Médicas (SEM) y del cuerpo de Bomberos de la Policía. También estuvieron presentes el jefe de Policía, Daniel Guinchinau; el jefe de la UR-I, Claudio Cano; el jefe del área capital de la UR-I, Juan Carlos Mendiz; el jefe de Bomberos, Enzo Ojeda; personal de la Brigada de Investigaciones, de la Unidad Funcional de Género, Niñez y Adolescencia, y un equipo integral de fiscales conformado por el fiscal de Delitos que impliquen Violencia Familiar y de Género, Marcos Sacco, el fiscal de Delitos contra las Personas, Oscar Cazenave, y el fiscal general, Máximo Paulucci.